Patologías comunes

Enfermedades de las uñas

Uña encarnada

El tratamiento quiropodológico estirpará la espícula (fragmento de la lámina ungueal) que se clava, pero no actuará sobre la matriz ungueal, por tanto será muy frecuente la reaparición del problema dado que no se ha eliminado la causa, y sólo conseguiremos una mejoría temporal. Los casos en los que la recidiva sea frecuente se deberá optar por el tratamiento quirúrgico como solución definitiva. En muchas ocasiones el tratamiento quiropodológico debe ir acompañado de una terapia farmacológica en forma de antibióticos ya que suele generar constantes infecciones en el rodete periungueal.

Onicomicosis

Infección por hongos de la uña. En función del hongo que contagia la uña, ésta presentará un aspecto clínico y una sintomatología característica. Pueden aparecer manchas longitudinales amarillas, blanquecinas…

Cuando sea necesario se tomará una muestra y se mandará al laboratorio para su cultivo. El tratamiento irá en función del hongo causante de la infección y del estadio en el que se encuentre la misma. En función de ello aplicaremos un antimicótico de forma tópica o se precisará complementarlo con antimicóticos orales. La aplicación de estos antimicóticos debe complementarse con la estirpación del mayor fragmento de uña afectado, para favorecer el buen resultado del tratamiento.

Onicotrofía u onicogrifosis

Se caracteriza por un aumento del grosor de la lámina ungueal, adquiriendo una coloración opaca. Hay diferentes causas que pueden provocar este engrosamiento de la uña y su origen es muy variado, desde la predisposición genética a los traumatismos (una de las causas más frecuentes) o los déficits vasculares (falta de riego sanguíneo a este nivel). El tratamiento será principalmente quiropodológico, consistiendo en el fresado (limado) de la uña afectada periódicamente, de modo que normalicemos su espesor y no genere molestias.

CITA PREVIA

Contacta con nosotros.

CITA PREVIA

Pide cita previa con nosotros. Estamos deseando conocerte.